Más tarde me siento alegre.
Wittgenstein silba. En los prados, W. habla en alemán a algunas vacas. Las
vacas adoran el alemán, explica, incluso nuestro ganado inglés. Éstas son
Guernsey, moteadas y de suaves cuernos; se nos acercan al trote. Estamos
rodeados. Como damas celosas, nos propinan topetazos y testarazos para que les
rasquemos detrás de las orejas y las libremos de las insistentes moscas.
Más tarde comemos en un pálido
campo de pastos nuevos. Después, cerca del atardecer, sucede algo maravilloso.
Se aproximaba la tormenta. Junto al río, los juncos se balancean arriba y abajo
como sábanas de seda verde. La hierba está muy alta y de pronto W. se excita
extraordinariamente. Sobre el agua nacen enjambres de efímeras. Como las
chispas que brotan de un tronco ardiendo; salen de las profundidades ... nubes de
efímeras muy blancas que rebullen sin ruido sobre el agua. Sentado en la
orilla, W. está como bajo una tienda; le cae encima una nevada de insectos y él
mira hacia arriba, conmovido. Sobre el agua, las ninfas forman una nébula
blanca y delgada, después cae un chaparrón que hace chisporrotear el agua. Expuestos
aquí podríamos ser alcanzados por un rayo, pero él, que por lo general es tan
práctico, no parece preocupado. No me presta atención cuando lo llamo y
entonces comprendo lo que pasa. Las moscas caen en el agua. Van precipitándose
a millares, saltando como una blanca agua de seltz. El agua queda inundada y
todas están muertas.
Mirándome, W. dice: «¿No es
hermoso? ¿Que todas se eleven y caigan en nombre de la misma hermosa necesidad?
¿No sería maravilloso que todos nosotros nos levantáramos en la luz y cayéramos
todos al unísono, sirviendo sólo a la naturaleza?”
Me quedo espantado. Digo: «Me
parece estupendo para las moscas, pero no para los hombres. ¿Que todas las
generaciones cayeran así, juntas? ¿Cómo puede decir que es maravillosa esa idea?»
Ahora me está mirando, no
enfadado sino triste; al parecer no comprendo aunque yo creo que sí. Él dice:
«No se puede estar triste por eso, por la necesidad”.
1 comentario:
Publicar un comentario