De El día en que Nietssche lloró de Irvin D. Yalom, p. 57
-A ver, déjame pensar. -Breuer
recordaba que la primera vez había sido poco después de empezar a dudar de la
eficacia del tratamiento que venía dando a Bertha; lueg: .hablando con Frau
Pappenheim, había surgido la posibilidad de trasladar a Bertha a la Clínica
Bellevue en Suiza. Había sido a principios de 1882, hacía casi un año. Como había
dicho a Freud. -¿Y no fue este enero -preguntó Freud- cuando celebramos en esta
misma casa, con la familia Altmann al completo, tu último cumpleaños? Cumpliste
cuarenta. Si has tenido ese sueño desde entonces, ¿no es lógico suponer que los
cuarenta pies se refieran a tu edad?
Bien, dentro de un par de meses
tendré cuarenta y uno. SI tienes razón, ¿no debería caer cuarenta y un pies en el
sueño, a partir de enero próximo?
Freud levantó los brazos.
-De ahora en adelante, necesitaremos
consultar con otra persona. Yo he llegado a los límites de mi teoría sobre los
sueños. ¿Cambian los sueños ya soñados para adaptarse a los cambios producidos
en la vida del soñante? ¡Interesante pregunta! De todos modos, ¿por qué se
transforman los años en pies? Y el pequeño fabricante de sueños que tenemos en
la mente, ¿por qué se roma tanto trabajo para disfrazar la verdad? Mi
suposición es que la caída no cambiará a cuarenta y un pies. Creo que el
fabricante de sueños tendría miedo de cambiarlo cuando tengas un año más,
porque sería demasiado transparente y revelaría el código onírico.
Sig -dijo Breuer sofocando la
risa mientras se limpiaba la boca y el bigote con la servilleta:-, aquí es donde
siempre disentimos: cuando te pones a hablar de otra mente, una mente distinta,
un duende sensible dentro de nosotros que concibe sueños rebuscados y los
presenta disfrazados ante nuestra conciencia ... me parece ridículo.
Estoy de acuerdo, parece ridículo;
no obstante, fíjate en la evidencia, en todos los científicos y matemáticos que
han dicho que han resuelto problemas importantes en sueños. Josef, no existe explicación mejor. Por ridículo que parezca,
tiene que haber una inteligencia inconsciente
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