La inflación alemana, Josep Pla, p. 317
La característica de Hitler es el
impermeable. Es un impermeable vulgar, con cinturón y solapas grandes, pero
parece el patrón del que han salido los impermeables vulgares, con solapas
grandes y cinturón. En la manga del impermeable, Hitler lleva una gran cruz
teutónica. Esta cruz, hoy, en Alemania, es el signo anti judío. Los judíos usan
los dos triángulos superpuestos e invertidos. Los anti judíos usan una cruz con
unas prolongaciones hacia los cuatro lados que le dan la impresión de ser una
cruz con patas.
-La situación política en
Alemania --dice Hitler para empezar- es desde el punto de vista de la dignidad
de nuestro partido, desde el punto de vista de la dignidad de la raza, verdaderamente
intolerable. Nosotros estamos decididos a todo, menos a petrificarnos en este
estado de vergüenza y de abyección. La guerra es preferible, infinitamente
preferible, a la continuación de esta abyecta servidumbre. En todas partes del
mundo han triunfado los hombres de orden, de puño de hierro, los patriotas, los
verdaderos amigos de su país. Aquí estamos aún dominados por una serie de
experimentadores siniestros, vendidos al extranjero, marxistas y judíos. Todo
esto se debe expeler. Sobre todo, tenemos que resolver de una forma general,
con una explosión en los cuatro puntos cardinales del Imperio, el problema
judío. Este problema lo resolveremos con la expulsión en masa. Tenemos un
precedente en lo que hizo España con los judíos. Nosotros, sin embargo,
corregiremos la solución española. No les dejaremos a los judíos la opción de
la conversión o la expulsión, como hizo España. No. Estamos a favor de la
expulsión pura y simple. Para España, el problema judío era un problema religioso:
para nosotros es un problema de raza. Aquí, en Baviera, ya se está expulsando a
los judíos, que no son ciudadanos bávaros. Es un primer paso para la expulsión
general.
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