Te quiero más que a la salvación de mi alma

Te quiero más que a la salvación de mi alma
Catalina en Abismos de pasión de Luis Buñuel

LOS PAJAROS


El fin del fin del  mundo, Franzen, p. 49
Si pudieras ver todos los pájaros del mundo, verías el mundo entero. Hay plumíferos en los confines de todos los océanos y en tierras tan inhóspitas que ningún otro animal podría establecer en ellas su hábitat. La Gaviota Garuma cría a sus polluelos en el desierto de Atacama, uno de los lugares más secos de la Tierra; el Pingüino Emperador incuba sus huevos en la Antártida en invierno; el Azor común anida en el cementerio de Berlín donde yace Marlene Dietrich; los gorriones, en los semáforos de Manhattan; los vencejos, en cuevas marinas; los buitres en los riscos del Himalaya; los pinzones, en Chernóbil. Los únicos seres vivos más ampliamente diseminados por el globo son microscópicos. Para sobrevivir en hábitats tan distintos, las diez mil especies de pájaros que, aproximadamente, pueblan el planeta han evolucionado en una extraordinaria diversidad de formas. Su tamaño varía desde el avestruz, que puede alcanzar más de dos metros y medio de altura y vive a lo largo y ancho de África, hasta el Colibrí Zunzuncito, que tan sólo se encuentra en Cuba y que en inglés recibe un nombre muy apropiado, Bee Hummingbird ['colibrí abeja']. Pueden tener picos enormes (pelícanos, tucanes), diminutos ( Gerigón Piquicorto ), o del mismo tamaño que el resto de su cuerpo (Colibrí Picoespada). Hay pájaros (el Azulillo Sietecolores de Texas, la Suirnanga de Gould del sur de Asia, el Lori Arcoíris de Australia) más llamativos que cualquier flor, otros se presentan en alguna de las casi infinitas gamas de marrón y ponen a prueba el vocabulario de los taxónomos de la ornitología: rufo, rubicundo, ferruginoso, cinabrio, bermellón.
Su comportamiento no es menos diverso. Algunos son muy sociables; otros, lo contrario: mientras que las queleas y los pelícanos de África se reúnen en bandadas de millones de ejemplares y los loris construyen ciudades enteras con palitos para vivir con sus congéneres, el Mirlo Acuático vive solitario en los arroyos de montaña, donde nada y bucea, y un Albatros Errante puede planear, con sus alas de tres metros de envergadura, a ochocientos kilómetros  de cualquier otro albatros. El Abanico Maorí de Nueva Zelanda es tan simpático que puede llegar a seguirte por un sendero; un caracara, si te lo quedas mirando demasiado rato, se lanzará en picado e intentará arrancarte la cabeza de un picotazo. Los correcarninos se alimentan de serpientes de cascabel a las que matan en equipo: uno distrae a la serpiente mientras otro se le acerca por detrás. Los abejarucos comen abejas. Los tirahojas tiran hojas. El Guácharo, un ave nocturna única del trópico americano, planea sobre los aguacates y arranca los frutos en pleno vuelo; el Caracolero Común hace lo mismo, pero con los caracoles. El Arao de Brünnich se sumerge hasta una profundidad de 215 metros, el Halcón Peregrino vuela en picado a 385 kilómetros por hora. El Junquera se pasará toda la vida junto a un charco de veinte centímetros cuadrados mientras que la Reinita Cerúlea es capaz de emigrar a Perú y luego encontrar el camino de regreso al mismo árbol de Nueva Jersey en el que anidó el año anterior.

No hay comentarios:

WIKIPEDIA

Todo el saber universal a tu alcance en mi enciclopedia mundial: Pinciopedia