Te quiero más que a la salvación de mi alma

Te quiero más que a la salvación de mi alma
Catalina en Abismos de pasión de Luis Buñuel

INCIPIT 1.529. EL EXCLAUSTRADO / ALVARO POMBO


Don Juan Cabrera, el discreto exclaustrado, desatiende un momento su manuscrito para cerrar la puerta-ventana del despacho de alto techo con las cuatro paredes de librerías abarrotadas. A estas alturas de la vida, cumplidos ya los setenta y dos, el doctor Cabrera no piensa como Flaubert que eso que se llama «conciencia» sea tan solo la vanidad interior. No cree que la conciencia sea vanidad porque la conciencia del doctor Cabrera siempre ha sido la voz de su conciencia, una voz exigente, poco dada a vanidades interiores o exteriores. En este diminuto piso suyo, a excepción de una terracita abalconada que da a poniente, todo es despacho. Como Mallarmé, Cabrera está seguro de que todo existe para convertirse en libro. El único problema, de momento, es que se le resiste la composición de libros propiamente dichos, solo se le ocurren fragmentos, como muchos capítulos de un libro que sería su autobiografía o sus memorias si no fuera porque detesta el género autobiográfico. Pero ¿cómo vive don Juan Cabrera? Vive confinado. Lleva viviendo así muchos años. Pero solo ahora, con el confinamiento del covid, su confinamiento roza la agorafobia, por tratarse ahora no tanto de una voluntad propia como de la voluntad ajena, la voluntad del Estado

No hay comentarios:

WIKIPEDIA

Todo el saber universal a tu alcance en mi enciclopedia mundial: Pinciopedia