Te quiero más que a la salvación de mi alma

Te quiero más que a la salvación de mi alma
Catalina en Abismos de pasión de Luis Buñuel

LOS RESTOS DE BENJAMIN

Un final para Benjamin Walter, Alex Chico, p. 123
Lo último que escribió Walter Benjamin fue una carta. Se la entregó a Henry Gurland, con quien había atravesado la frontera poco antes. Gurland debía trasmitir su contenido a uno de  los amigos más cercanos de Benjamin, el filósofo alemán Theodor W Adorno. Sabemos lo que decía esa carta, pero no dónde está, porque no se conserva ninguna prueba de su existencia. Es esta: «En una situación sin salida no tengo más opción que ponerle fin. Será en un pequeño pueblo de los Pirineos en el que nadie me conoce donde mi vida se acabará». Antes había ingerido una gran dosis de morfina. Después de sufrir intensos dolores y de rechazar enérgicamente un lavado de estómago, Walter Benjamin murió hacia las diez de la noche del 26 de septiembre, aunque en otras versiones la hora de su defunción se situara al dia siguiente, de madrugada. Se le diagnostica “ataque de apoplejía” o “hemorragia cerebral”. Poco sabemos del médico que le atendió. O de los médicos que fueron a verle. Firmó el acta Ramón Vila Moreno. La señora Gurland pagó su sepultura por cinco años. En el verano de 1945, después del traslado de sus restos desde el nicho 563 a una fosa común, el rastro de Walter Benjamin se perdió por completo. Así se convertía, él también, en un ser anónimo.

De su paso por Portbou nos quedan unos pocos datos. Entre otros, un informe de la carpintería Mecánica, propiedad de Enrique Espadalé. 313 pesetas por una caja mortuoria forrada de paño con varias aplicaciones, además de los seis hombres que condujeron el féretro al cementerio y el albañil encargado de cerrar el nicho. También sabemos el contenido de la factura del hotel, 166,95 pesetas por los siguientes servicios: cinco días de habitación (Benjamin estuvo en ella la mitad de ese tiempo), cuatro conferencias telefónicas (¿a quién?), una cena, cinco gaseosas con limón, gastos de farmacia, vestido del difunto, desinfección, lavado y blanqueamiento. A eso habría que sumarle 7 5 pesetas por las cuatro visitas del médíco, el ya citado Ramón Vila Moreno, por las inyecciones, tomas de presión arterial y sangría. Sin olvidar las 50 pesetas destinadas al juzgado municipal y las 93 que fueron a parar al cura Andrés Freixa, que firmó el acta de defunción, registrada en la parroquia de Santa Maria de Portbou: “El 26 de septiembre de 1940 ha fallecido aqui en Portbou, obispado y provincia de Gerona, a la edad de 48 años, el señor Benjamin Walter, nacido en Berlin, procedente de Francia, casado con Dora Kellner. Ha recibido los santos sacramentos. Al día siguiente ha recibido sepultura en el nícho número 1 de los nuevos nichos, en el lado sur de la capilla del cementerio católico de este lugar. Andrés Freixa, sacerdote”.

No hay comentarios:

WIKIPEDIA

Todo el saber universal a tu alcance en mi enciclopedia mundial: Pinciopedia